Los tres tipos básicos de iluminación
Explore cómo la luz da forma a la percepción y mejora el diseño a través de los principios visionarios de Richard Kelly. La luminiscencia ambiental, el resplandor focal y el juego de brillantes siguen orientando el diseño de iluminación, combinando arte y ciencia para crear espacios significativos e inspiradores.
Richard Kelly y la psicología de la luz
Richard Kelly revolucionó el diseño de iluminación arquitectónica con su ensayo de 1952 titulado «Light as an Integral Part of Architecture» (La luz como una parte íntegra de la arquitectura). Introdujo tres principios fundamentales de iluminación: luminiscencia ambiental, resplandor focal y juego de brillantes, pasando la conversación de la precisión técnica a la experiencia humana. Sus principios priorizaban el impacto emocional y psicológico de la iluminación, inspirando a los diseñadores para crear espacios que equilibrasen utilidad, belleza y conexión humana.
Luminiscencia ambiental
La luminiscencia ambiental crea un ambiente cómodo y acogedor al proporcionar una luz suave y sin sombras que garantiza que todo en el espacio sea visible sin llamar la atención sobre detalles específicos. Esta iluminación general se distribuye de manera homogénea, ofreciendo una sensación de calma y uniformidad. Aunque puede parecer puramente funcional, la luminiscencia ambiental sienta las bases para un diseño de iluminación por capas, lo que garantiza que el espacio esté iluminado de manera homogénea y listo para la incorporación de elementos de iluminación más dinámicos y expresivos.
Resplandor focal
Mientras que la luminiscencia ambiental sienta las bases para espacios iluminados de manera homogénea, el resplandor focal lleva la iluminación al siguiente nivel creando énfasis y contraste. Esta técnica de iluminación es muy intencionada y está diseñada para dirigir la atención y dar forma a la narrativa que el diseñador desea transmitir.
Juego de brillantes
El principio final de la filosofía de iluminación de Richard Kelly es el juego de los brillantes. Históricamente, este efecto se logró utilizando luz de velas, candelabros o materiales reflectantes. Hoy en día, la moderna tecnología de iluminación ofrece innumerables posibilidades para crear un brillo cautivador que agrega profundidad y energía a un espacio.